Tratamiento de hemorroides con radiofrecuencia (SISTEMA RAFAELO)

Las hemorroides son estructuras fisiológicas constituidas por plexos vasculares arteriovenosos que forman un almohadillado a lo largo del canal anal. Las hemorroides ocasionan síntomas cuando presentan alteraciones estructurales del tejido hemorroidal (dilatación e ingurgitación) y/o de los tejidos de sostén adyacentes. La prevalencia de la enfermedad hemorroidal, según los diferentes estudios y la edad de la población estudiada, es muy variable y oscila entre el 4 y el 86%.

Las hemorroides se clasifican en externas e internas. A pesar de que las hemorroides han sido clasificadas clásicamente en 4 grados, algunos autores proponen clasificarlas mediante la presencia o ausencia de sangrado o prolapso3. La clasificación clásica de las hemorroides internas es la siguiente:

  • Grado I. Protrusión en el canal anal sin prolapso exterior.
  • Grado II. Prolapso con resolución espontánea.
  • Grado III. Prolapso con reducción manual.
  • Grado IV. Prolapso continuo que se reproduce tras su reducción.

La mayoría de las personas con hemorroides sintomáticas pueden tratarse con medidas higienicodietéticas o con tratamientos farmacológicos. Habitualmente, en los pacientes con hemorroides sintomáticas de grados I y II, y en algunos casos de clase III que no responden a las medidas conservadoras, se han utilizado métodos de ablación o fijación no quirúrgicos, reservando las técnicas de hemorroidectomía quirúrgica para las hemorroides sintomáticas de grado IV9.

El objetivo de los métodos de ablación o fijación no quirúrgicos es conseguir la fibrosis entre el esfínter anal interno subyacente y las hemorroides, evitando su deslizamiento, congestión y prolapso.

Millones de personas en todo el mundo sufren de hemorroides. Esta enfermedad tiene un gran impacto en la vida diaria del paciente, desde molestias y vergüenzas hasta sangrado doloroso e incapacidad para funcionar en etapas posteriores. Aunque las técnicas tradicionales pueden ser la cura, a menudo resultan en una recuperación dolorosa y en el regreso a largo plazo de los síntomas.

F Care Systems ha desarrollado una técnica revolucionaria llamada procedimiento de Rafaelo®. El tratamiento con Rafaelo® o Radiofrecuencia de las hemorroides bajo anestesia local+sedación es un nuevo enfoque con excelentes resultados clínicos y recuperación rápida.

El Procedimiento Rafaelo: Un tratamiento seguro y eficaz de las hemorroides con resultados duraderos. El Procedimiento Rafaelo debe considerarse el “gold standard” en este tipo de tratamientos. “Teniendo en cuenta que la técnica de bandas elásticas puede fallar y requieren varias aplicaciones y que la cirugía causa importantes molestias, el Procedimiento Rafaelo es la alternativa perfecta.”

Las ventajas de este procedimiento son una menor agresión quirúrgica, escaso o ausente dolor postoperatorio, un índice de complicaciones bajo y que no precisa curas ni baja laboral. La técnica puede suponer una alternativa óptima para algunos pacientes con patología hemorroidal y síntoma predominante de sangrado.

Se trata de una terapia quirúrgica no exerética, menos invasiva que las empleadas hasta ahora, para hemorroides internas hasta grado III que permiten el tratamiento completo de todos los paquetes hemorroidales en el mismo procedimiento.

Frente a las técnicas convencionales de hemororidectomia, con el sistema Rafaelo, el paciente puede operarse en régimen de cirugía mayor ambulatoria (CMA), para su realización se usa sedación asociada a la anestesia local que se infiltra durante el procedimiento, o locorregional.

En este sentido, son raras otras complicaciones como el sangrado, y tan sólo existe una exudación inicial.

La necesidad de baja laboral es prácticamente inexistente y la recurrencia a los dos años, inferior al 3 por ciento.

Los resultados son excelentes tanto en cuanto a evolución en el postoperatorio inmediato (dolor, sangrado y reincorporación a su actividad habitual), como en el seguimiento a medio plazo.

PROCEDIMIENTO RAFAELO

  • El paciente acude en ayunas de 8h.
  • Se pasa al quirófano, bajo sedación y anestesia local de la zona se procede.
  • Insertarmos el anoscopio en el recto del paciente para visualizar la hemorroide.
  • Aplicar anestesia local (Ropivacaína, 3 a 6 ml) en la capa muscular debajo de la hemorroide, NO en el tejido de la hemorroide.
  • Insertar la sonda HPR45i en la hemorroide y aplicar la energía de RF.
  • Aplicar la energía de RF en la superficie de la hemorroide.

La punta de la sonda se inserta en la hemorroide y se aplica una señal de radiofrecuencia, procedente del generador, sobre la punta.

La hemorroide se coagula mediante el calor inducido por la radiofrecuencia, que hace que el tejido hemorroidal se encoja y se forme una costra sobre el tejido. La costra se desprende automáticamente al cabo de un tiempo.

Tras la cirugía el paciente pasa a la unidad de recuperación, para un alta precoz en 3-4h tras el procedimiento.